Empleado falta a su graduación por ir a trabajar y su jefe lo lleva al acto. Era su gran día

En la actualidad, las condiciones laborales precarias y los precios inflados de muchas cosas básicas nos hacen tener que trabajar más por lo que necesitamos para vivir: casa, comida, agua, y algún que otro gusto que nos damos, claro, si es que podemos. Es por esto que nadie se puede dar el lujo de no trabajar. No solo es una obligación, es un pase para conseguir un poco de la vida que merecemos.

Este fue el caso de Timothy Harrison, quien tuvo que ir a trabajar en uno de los momentos más importantes de su vida: Su graduación de la universidad. Timothy trabaja en el Waffle House como mesero, el día de su acto académico se presentó como otro día común en el trabajo. Llegó a las 7 am para comenzar su turno y ahí fue cuando su gerente se sorprendió.

Cedric Hampton, quien llega a abrir el restaurante le preguntó qué ¿Qué hacía ahí? pues hace unas semanas le había pedido un turno libre para poder asistir a su graduación. La respuesta del joven lo enterneció mucho.

Resulta que la familia de Timothy no pudo conseguir el tiempo para poder asistir al evento con él, lo cual lo desilusionó por lo que decidió mejor no ir.

Esto también incluía que no tenía transporte, o dinero, para poder ir al lugar de la ceremonia, por lo que mejor decidió ir a trabajar como si fuera un día más. Ahí fue donde Cedric decidió hacer algo muy especial para el mesero.

«Le dije: ‘Vete a casa, consigue tu papeleo, llama a la escuela y nos encargaremos del resto’. Para mí, fue una obviedad. La graduación es una de esas cosas que puedes hacer una vez en la vida, y cuando has trabajado todos estos años yendo a la escuela para tener ese momento, es necesario estar allí». Comentó Cedric Hampton, jefe de Harrison de acuerdo a información de The Washington Post.

Sin embargo, Timothy no tenía ni la toga o el birrete, incluso los boletos los había dejado en su casa. Cedric envió a los demás empleados a buscar todo para que el joven pudiera ir sin ningún problema a su graduación. Incluso le ayudaron a vestirse para la ocasión. Él ha trabajado por más de 4 años en el restaurante, el cariño de su jefe no era para menos.

«Mi familia laboral es útil y considerada. Se aseguran de que todos los que les rodean estén bien”, comentó el joven.

Esta historia tuvo un final feliz, pero desafortunadamente no todas lo tienen. Comparte esta nota con todos para que gestos así se repitan por todo el glob