Dubai “está jugando con Dios” lo acusan por “plantación” de nubes y lluvia artificial

Uno de los proyectos con que se pudo este propósito, radica en agredir las nubes con cargas eléctricas, por medio de drones perfeccionados. Por ahora ha funcionado perfectamente, en la meta de batallar las altas temperaturas, de hasta 50ºC.

Las temporadas de lluvia y calor cada vez son más irregulares. El calentamiento global ha enloquecido al clima y acarreado enormes sequías en varios sitios del globo. En Dubái, uno de los Emiratos Árabes Unidos, los veranos tienden a ser largos y muy calurosos, aunque además áridos y nublados.

Los inviernos son más bien secos y con escasas lluvias, lo que sin lugar a dudas puede ser un inconveniente.

En este momento, para batallar las altas temperaturas, de hasta 50ºC, han “sembrado” sus nubes y hicieron llover de forma artificial. Los culpan de “jugar a ser Dios”.

Más allá de ser una medida para batallar las temperaturas extremas, generó bastantes anticuerpos. Más que nada porque el tiempo por lo general se asocia a una cuestión más bien divina.

“Verdaderamente los ricos del mundo…”, escribió un usuario de Internet.

Según anunció el medio Khaleej Times, se han generado lluvias en numerosas localidades, además de preverse para los siguientes días.

Para batallar este desfavorable clima, para la agricultura y otras superficies, han usado la tecnología.

Desde las autoridades de los Emiratos Arabes Unidos, financiaron un emprendimiento de “siembra” de nubes por medio de drones. Pagaron bastante más de 10 millones de euros, para llevar a cabo nueve proyectos diferentes, todo en el marco del combate contra la carencia de lluvias.

La novedosa medida fue liderada y llevada a cabo por la Facultad de Reading, quien está detrás de la construcción de los drones.

Este sistema trabaja atacando las nubes con cargas eléctricas, cargando las gotas de agua y realizando más posible que caigan y se contengan por el volumen.

“Lo que estamos tratando de hacer es hacer que las gotas dentro de las nubes sean lo suficientemente grandes para que cuando caigan de la nube, sobrevivan hasta la superficie”.

–explica Keri Nicoll, investigador del proyecto.

No usa elaborados químicos ni otros contaminantes, por lo cual la medida ganó seguidores.

De esta manera, generó anticuerpos y críticas, por “jugar a ser Dios”.

Por estos días, Dubái experimenta temperaturas de unos 41ºC, sin una gota de lluvia. No obstante, las repentinas precipitaciones llegaron y, los profesionales Meteorólogos lo asociaron a la siembra de nubes.